Se acerca una de las épocas del año en las que el protocolo adquiere un papel más importante en nuestro día a día, por eso, desde Thuya Escuela, os traemos una serie de tips imprescindibles de protocolo para que vivas tus Navidades más elegantes.

¿Dónde se pasa más tiempo en Navidad? Alrededor de la mesa, y por ese motivo os traemos algunas nociones básicas de protocolo e imagen personal en la mesa:

 

Los invitados:

 

Sentar a los invitados es siempre un quebradero de cabeza, por eso te damos algunos consejos para facilitarte la tarea. Los anfitriones deben ocupar el lugar presidencial, y la regla de oro es colocar a sus mayores a su lado, ya sea a la izquierda o la derecha. Si se cuenta con un invitado muy especial, este se situará al lado de los anfitriones. ¡Recordad! Separar hombres y mujeres es algo completamente anticuado y nada protocolario.

 

Los cubiertos:

 

Siempre se usan de fuera hacia adentro, primero los más alejados del plato y finalmente los más cercanos. En Navidad es muy frecuente llenar las mesas de cubertería, y es que es uno de los elementos que más visten la mesa. ¡Eso sí! Hay que recordar no tocar ningún cubierto hasta que llegue la comida.

 

El pan:

 

¿Quién no se ha preguntado alguna vez si debe coger el de la izquierda o el de la derecha? Tenemos la respuesta para que no te vuelvas a olvidar, el que debes coger es el de la izquierda, nunca el de la derecha.
La servilleta: Tenemos la costumbre de llegar a la mesa y desplegar la servilleta sobre nuestro regazo, pero, protocolariamente se trata de algo incorrecto, ya que la servilleta no hay que tocarla hasta que llega el plato de comida.

 

La bebida:

 

Hay que olvidar esa fea costumbre de llenar las copas hasta el borde. Lo correcto, con el vino es llenarlas hasta algo más de la mitad de la copa. Tampoco se debe beber nunca de un trago, sino siempre a pequeños sorbos.

 

Velas:

 

Son siempre bienvenidas en las mesas de Navidad, se pueden colocar de distintas formas, y siempre dan un toque muy navideño. Hay que recordar que sí son adecuadas para comidas o cenas, pero nunca para almuerzos.

 

Música de ambiente:

 

Se suele decir que la mejor melodía es una buena conversación, pero, si se quiere un ambiente relajado se puede poner música en un segundo plano. Es mejor evitar los villancicos y, sobre todo, comer con la radio o la televisión puesta.

 

Así que ya sabes, esta Navidad no olvides estas reglas protocolarias en todas tus reuniones familiares.